En el marco del encuentro entre Millonarios y Atlético Nacional, disputado en el estadio El Campín de Bogotá el pasado viernes, surgieron varias controversias, una de ellas relacionadas con lo que inicialmente se reportó como una agresión al bus del equipo antioqueño. Sin embargo, ante las versiones cruzadas y los videos que comenzaron una circular en redes sociales mostrando el autobús con vidrios rotos, la oficina de prensa del Atlético Nacional salió a esclarecer los hechos, desmintiendo que hubiera existido un ataque directo.
Aclaración sobre el incidente con el autobús
Según la comunicación oficial del Atlético Nacional, el autobús no fue atacado ni los vidrios fueron quebrados por hinchas, como se había señalado en algunos videos y publicaciones en redes. En cambio, se explicó que el problema surgió cuando un miembro del personal de seguridad del club local, Millonarios, cerró una reja de acceso mientras aún quedaban jugadores del equipo visitante dentro del vehículo, lo que generó confusión y retraso en el ingreso de los futbolistas. al estadio.
«En cuanto a lo que pasó llegando al estadio, informamos que el bus no fue atacado ni nos quebraron los vidrios. Tuvimos inconvenientes al ingresar porque la persona de seguridad del equipo local cerró la reja del estadio y aún faltaban jugadores por entrar, entre ellos Ospina. Fue una decisión peligrosa porque afuera sí cayeron algunas monedas. Finalmente, logramos ingresar los jugadores y todo el staff”, indicó el comunicado oficial del club.
Aunque se mencionan algunos objetos que fueron lanzados desde el exterior del estadio, como monedas, los informes oficiales no indican que se haya producido una agresión directa al autobús ni que se hayan presentado heridos o daños graves.
Es importante destacar que, hasta el momento, no se han presentado denuncias formales ante las autoridades sobre hechos violentos en contra de la delegación de Atlético Nacional, ni al momento de su llegada al estadio ni cuando el equipo abandonó el lugar rumbo al hotel de concentración. tras el encuentro.
Denuncias de racismo en El Campín
Por otro lado, otra polémica surgió durante el mismo encuentro, esta vez relacionada con una denuncia de racismo formulada por el delantero del Atlético Nacional, Marino Hinestrosa. Durante el partido, el jugador afirmó haber sido víctima de gestos y gritos racistas por parte de algunos hinchas en el estadio El Campín, lo que lo llevó a exigir que la Dimayor, la entidad encargada de la organización del fútbol profesional en Colombia, tomara medidas. contundentes.
Hinestrosa expresó su indignación en la zona mixta después del partido, manifestando que fue llamado «mono» y que se le hicieron gestos despectivos. «Ellos me hicieron mono. También quería mandarle un mensaje a la Dimayor, esperemos que tomen repercusiones, así como toman porque Edwin besa el escudo, o porque el profesor celebra. Quiero ver el mañana comunicado de esos tres tipos que me hicieron gestos racistas, «Que eso sí está mal, porque celebrar un gol no está mal, de eso se trata el fútbol, el fútbol es alegría, el fútbol es libertad en su máxima expresión», declaró el jugador.
Esta situación de racismo en el fútbol colombiano no es nueva, pero la denuncia de Hinestrosa ha vuelto a poner sobre la mesa la necesidad de tomar acciones más firmes en contra de este tipo de comportamientos, especialmente en un deporte que debería ser inclusivo y representar la unidad y el respeto. El delantero dejó claro que esperaba una respuesta de las autoridades deportivas, comparando la situación con las sanciones que se imponen por otros incidentes en el campo de juego.
Reacción del técnico de Nacional sobre las celebraciones
El tema de las celebraciones de los goles también fue abordado por el técnico del Atlético Nacional, quien fue cuestionado acerca de las sanciones impuestas a jugadores por besarse el escudo de la camiseta, una costumbre que ha generado controversia en varias ocasiones. El entrenador dejó claro que no se opondrá a que sus jugadores expresen su orgullo por vestir la camiseta del club.
«No le puedo decir a mi jugador que no bese el escudo, que no se sienta orgulloso de portar esa camiseta. No se lo puedo decir, y al contrario, lo voy a incitar, le voy a decir, ‘besa tu escudo, siéntete parte’ Es lo que estamos logrando, estamos logrando esa sintonía de pertenencia, de que quieran y vengan y se maten por esta camiseta», afirmó el técnico, haciendo énfasis en la importancia de fomentar el amor y el respeto por el club.
Este tema también ha generado debate, ya que algunas personas han cuestionado la actitud de ciertos jugadores en sus celebraciones, mientras que otros defienden la libertad de expresión dentro del campo. En todo caso, el entrenador de Nacional subrayó que no pedirá a sus jugadores que dejen de celebrar, ya que consideran que ese tipo de gestos son una muestra de la conexión que tienen con el equipo y sus hinchas.
Conclusión
Este enfrentamiento entre Millonarios y Atlético Nacional no solo dejó la polémica deportiva, sino también tensiones relacionadas con el comportamiento dentro y fuera del campo. La aclaración de Atlético Nacional sobre el incidente con el autobús de la delegación visitante y las denuncias de racismo por parte de Marino Hinestrosa reflejan los problemas persistentes que aún afectan al fútbol colombiano, tanto en términos de seguridad como de respeto hacia los jugadores.
Con las investigaciones en curso sobre ambas situaciones, los aficionados y las autoridades esperan que se tomen las acciones necesarias para evitar que este tipo de incidentes se repitan, asegurando que el fútbol sea un espacio de inclusión, respeto y sana competencia.