Los tres se identifican que ha sido cercanos al presidente Petro en algún momento, pero por profundas diferencias se han alejado. Por ejemplo está el exministro de Comercio y exdirector de la Dian, Reyes, quien se ha convertido en un opinador y critico al gobierno. Lo mismo que el exmagistrado, Jaime Araujo, quien ha estado cercano a las candidaturas de Gustavo Petro en el pasado.
Sin embargo el elector entre ellos es el exgobernador del Magdalena, Carlos Caicedo, quien incluso ya en una oportunidad enfrentó a Petro en una consulta y perdió, pero ahora la situación ha cambiado y es Caicedo quien ha marcado esa división de la izquierda que no toda la une Gustavo Petro.
Caicedo dijo que rechazan las posturas camaleónicas que han tenido varios dirigentes que hoy hacen parte del Gobierno.
Caicedo expresó que “queremos hacer una consulta, queremos propiciar una consulta. Por supuesto es una consulta que incluye, una consulta que le pone una mirada a la esperanza para que los jóvenes tengan precisamente eso, jóvenes que han rechazado la politiquería y por eso se ha ido alejando crecientemente de los partidos, porque les cansa ver a un político que salta de partido en partido, de grupo en grupo, ahora siendo de la extrema derecha, mañana de la derecha, y en otro día aparece con la camiseta del progresismo”.
Para el exministro Rees, “esos elementos de la política clientelista que ha incorporado el Frente Amplio son obstáculos a la transformación del país. Esta es una consulta presidencial y esta es una lista al Congreso que lo que busca es transformar esa manera de relacionar el Ejecutivo con el Legislativo y por lo tanto no es la consulta del Frente Amplio”.
Insistió en que la consulta del Frente Amplio, a la que se espera llegue el candidato Iván Cepeda, va a tener la participación de sectores que en nada representan al progresismo, “rechazamos precisamente esas decisiones políticas que se han tomado en el Frente Amplio de incorporar elementos que no son de la política progresista, que son de la política clientelista, viéndolos como una necesidad para la transformación del país cuando son todo lo contrario”.



