La crisis que atraviesa el sector arrocero en Colombia sigue afectando gravemente a los productores, especialmente en el Huila. A raíz de la sobreoferta de arroz y los bajos precios que se están pagando a los campesinos, las autoridades locales se han visto en la necesidad de buscar soluciones para mitigar los efectos de esta problemática. El gobernador del Huila, Rodrigo Villalba Mosquera, ha liderado esfuerzos para concertar medidas que alivien la difícil situación de los arroceros de la región.
En una reciente cumbre realizada en el municipio de Espinal, Tolima, se discutieron las posibles salidas a la crisis. En la reunión participaron varios actores del sector arrocero, entre ellos, productores, representantes de Fedearroz, la viceministra de Asuntos Agropecuarios, Geidy Xiomara Ortega, y el presidente de la Federación Nacional de Arroceros, Rafael Hernández Lozano.
Durante el encuentro, se presentaron varias propuestas que podrían ayudar a regular los precios y ordenar la producción, como la creación de un FAIA (Fondo de Apoyo a la Industria Arrocera) que brinde incentivos para los insumos agropecuarios, tal como ya ocurre con el café.
El contrabando: grave problema
Uno de los temas más urgentes en la mesa fue el contrabando de arroz, que sigue afectando a los productores legales. Desde la Gobernación del Huila se propuso implementar controles fronterizos más estrictos y establecer canales exclusivos para la venta del arroz colombiano, de modo que los productos de contrabando no inunden el mercado.
Carlos Alberto Cuellar Medina, secretario de Agricultura del Huila, destacó que una de las estrategias sería garantizar la compra pública local para los arroceros, especialmente en sectores como la alimentación escolar y el suministro a las fuerzas armadas.
El panorama internacional también juega un papel crucial. La viceministra Ortega mencionó que Venezuela podría ser un destino para los excedentes de arroz, abriendo la posibilidad de nuevos mercados para los productores nacionales. Sin embargo, a pesar de la importancia de esta medida, muchos arroceros del Huila siguen siendo escépticos sobre la efectividad de estas soluciones.
Según Martín Vargas, dirigente de Dignidad Arrocera, una de las propuestas clave será un acuerdo sobre el precio mínimo del arroz, algo que se discutirá en el Consejo Nacional Arrocero (CNA) el próximo 19 de febrero. Vargas asegura que se requiere un incremento de al menos $2.000 por arroba para equilibrar los costos de producción.
El sector arrocero, que históricamente ha sido fundamental para la economía del Huila, se enfrenta ahora a uno de sus peores momentos. Aunque las propuestas presentadas en la cumbre son un paso hacia la búsqueda de soluciones, muchos arroceros continúan luchando por una salida que garantice su estabilidad económica y el futuro de la producción de arroz en el país.
