Una preocupante situación de inseguridad se presenta en zonas rurales del norte y occidente del Huila, donde varios docentes han sido víctimas de extorsión por parte de grupos que se identifican como disidencias de las Farc.
La denuncia fue realizada por Jairo Losada, tesorero de la Asociación de Trabajadores de la Educación del Huila (Adih), quien alertó sobre la presencia de grupos armados residuales que llegan directamente a las escuelas portando logos y vestimenta alusiva a estructuras ilegales.
“El flagelo que están sufriendo en estos momentos los maestros es la extorsión de grupos delincuenciales que se autodominan grupos armados residuales. Las investigaciones de las autoridades indican que se trataría de delincuencia organizada”, señaló el dirigente gremial.
La situación ha generado temor no solo entre los educadores, sino también en las comunidades. Según Losada, el clima de violencia ha obligado a que al menos 300 estudiantes del municipio de La Plata estén recibiendo clases virtuales, debido al miedo que generan las amenazas.
Los hechos más recientes ocurrieron en la zona rural de La Plata, donde los grupos ilegales han afectado la movilidad de docentes y estudiantes, poniendo en riesgo el derecho a la educación en estas regiones apartadas.
Ante esta grave situación, el vocero de Adih hizo un llamado urgente a los grupos armados para que respeten a los maestros y estudiantes, y se garantice la prestación del servicio educativo sin presiones ni amenazas.
Las autoridades ya iniciaron investigaciones para determinar si detrás de estas acciones hay estructuras criminales que estarían usando el nombre de disidencias para intimidar y obtener recursos de manera ilegal.
