Una incursión armada en el casco urbano del municipio de Teruel dejó como saldo dos personas muertas y dos más gravemente heridas. El ataque ocurrió el pasado sábado por la noche, en el barrio Candelaria, en la carrera 3 con calle 7. Según testigos, varios sujetos a bordo de motocicletas dispararon contra un grupo de hombres que se encontraban en la vía pública, frente a un establecimiento conocido como ‘El Pastuso’.
El Bloque Central Isaías Pardo del frente Ismael Ruiz, perteneciente a las disidencias de las Farc, se atribuyó la responsabilidad del ataque mediante un comunicado. En el texto, aseguraron que las víctimas estaban involucradas en actividades ilícitas, específicamente en el tráfico de drogas, lo que motivó el ataque. Uno de los fallecidos fue identificado como Wilmer Alberto Vivas Yonda, de 33 años, quien tenía antecedentes por tráfico de estupefacientes. La identidad del segundo fallecido aún no ha sido confirmada.
Los responsables del ataque, según las autoridades, eran al menos ocho individuos, quienes llegaron en tres motocicletas y dispararon a quemarropa con armas largas. Después del ataque, los criminales huyeron hacia el corredor que conecta Teruel con el municipio de Íquira, en el límite con el departamento del Cauca.
#Teruel 🚨
Mediante un comunicado, El bloque central Isaías Pardo, frente Ismael Ruíz de las disidencias de las Farc, se atribuyen los homicidios registrados la noche anterior en el municipio de #Teruel, occidente del #HuilaEl comunicado con fecha 16 de marzo de 2025, hace… pic.twitter.com/IrVd7I3E4H
— TSM Noticias (@tsmnoticias) March 16, 2025
La Policía Nacional, a través del coronel Carlos Eduardo Téllez Betancourt, confirmó que las personas heridas fueron identificadas como Wilson Andrés Chívez, de 22 años, y Juan David Álvarez, de 19 años, ambos originarios de Inzá, Cauca. Ambos se encuentran en estado crítico en un hospital de Neiva.
El ataque generó pavor entre los habitantes de la zona, quienes grabaron en video los momentos de angustia mientras las víctimas yacían en el suelo. A pesar de los esfuerzos de los paramédicos, dos personas no lograron sobrevivir a los múltiples disparos que recibieron.
El caso ha causado gran consternación en la comunidad local, ya que las víctimas eran conocidas recolectores de café. La hipótesis inicial de las autoridades es que el ataque podría estar relacionado con un ajuste de cuentas relacionado con actividades ilegales.
El Ejército Nacional y la Policía Judicial llegaron al lugar de los hechos para asegurar el área y recoger evidencias. Durante la madrugada, unidades de la Sijin recogieron seis vainillas de calibre 5.56 y otros elementos que serán fundamentales para esclarecer los homicidios.
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El Bloque Central Isaías Pardo, en su comunicado, advirtió a varios habitantes de la región, incluyendo a personas involucradas en el microtráfico, que serían «ajusticiados» si no abandonaban el departamento dentro de las próximas 24 horas. Las autoridades han instado a la comunidad a colaborar con información que permita dar con los responsables del crimen.
La situación en Teruel sigue siendo tensa, y las autoridades continúan trabajando para esclarecer el ataque y devolver la tranquilidad a los habitantes del municipio.
