Luego de casi dos meses de maniobras continuas para enfrentar los altos aportes hídricos provocados por la fuerte ola invernal en el departamento del Huila, la compañía Enel Colombia confirmó el cierre de las compuertas de sus hidroeléctricas El Quimbo y Betania.
La decisión se tomó tras analizar los pronósticos hidrológicos, que ahora tienden a la baja, y constatar que los niveles de los embalses se encuentran dentro de los límites normales. Durante el periodo de lluvias más intensas, Enel ejecutó acciones para amortiguar las crecientes de los ríos y mitigar posibles afectaciones en las zonas aledañas.
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La compañía informó que continuará con el monitoreo permanente de los caudales y del ingreso de afluencias a los embalses, como parte de su estrategia de gestión preventiva. Además, reafirmó que la operación de las centrales de generación no se ha detenido y se desarrolla con normalidad, bajo los protocolos de seguridad establecidos.
Enel también destacó que mantiene una coordinación constante con las entidades locales y regionales, como la Gobernación del Huila, las alcaldías municipales, los Consejos Municipales de Gestión del Riesgo y la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena (CAM), entre otros actores estratégicos.
Con esta medida, se busca garantizar la seguridad de las comunidades aguas abajo y asegurar la operación estable del sistema energético regional. Las hidroeléctricas El Quimbo y Betania son fundamentales para la generación eléctrica y la regulación hídrica del departamento.
