Señalan que “sectores radicales” buscan arrebatarle su investidura “mediante una acción jurídicamente temeraria, moralmente reprochable y políticamente perversa”.
La bancada cuestiona los argumentos en la acción judicial, calificándola de “absurdo e indignante” que los demandantes señalen que Uribe estaba haciendo campaña política el día de su atentado como una justificación del atentado perpetrado en su contra.
“Como si lo hiciera responsable del hecho ¡Qué despropósito! Esta acusación, traída de los cabellos es una afrenta a la razón y a la dignidad humana”, cuestionan.
Desde el Centro Democrático señalan que esta demanda no solo es una “instrumentalización burda de la justicia para legitimar la violencia”, sino que además es “un intento cruel de revictimizar a un hombre, insinuando que merecía el atentado”.
Agregan que es un intento de “aprovechar su momento de vulnerabilidad para destruirlo, no solo físicamente, sino también moral y políticamente, silenciando su voz”.
“Desde el Centro Democrático exigimos respeto por su vida y por el derecho que tiene de seguir representando su compromiso. Colombia no puede permitir que la violencia y el odio se impongan”, concluyen.
Pese a que el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe está en una clínica en cuidados intensivos y luchando por su vida tras el atentado del que fue víctima el 7 de junio, radicaron una demanda de pérdida de investidura en su contra en el Consejo de Estado.
La demanda fue interpuesta por el sindicato de servidores públicos del ministerio de defensa, fuerzas militares policía nacional (Sinsergen Mindefensa) y de la Confederación Unión de Trabajadores de Colombia, UTC.
COLPRENSA