El esperado regreso de Shakira a los escenarios se concretó la noche del 11 de febrero de 2025, en el Estadio Olímpico Nilton Santos de Río de Janeiro. La artista colombiana inauguró su gira mundial Las mujeres ya no lloran con un concierto electrizante que reunió a miles de seguidores de todas las edades.
El evento, que marcó su regreso después de siete años sin pisar un escenario, desbordó de emoción a los fanáticos. Desde temprano, las personas se congregaron en las afueras del estadio, ansiosos por ser parte de una noche histórica.
La energía en el ambiente era palpable, y Shakira no decepcionó, ofreciendo un espectáculo lleno de energía y sentimientos. Su presentación abarcó tres décadas de carrera, donde los fans disfrutaron tanto de los grandes éxitos de su repertorio como de los nuevos temas de su último álbum, que recientemente ganó el Grammy al Mejor Álbum de Pop Latino.
Un show lleno de emociones y éxitos
El concierto comenzó con la poderosa La Fuerte, un tema que marcó el inicio de la velada y preparó al público para una noche inolvidable. Con cada canción, la barranquillera encendió al público, que no paró de cantar y bailar. El repertorio incluyó clásicos como Las de la Intuición, Estoy Aquí, Hips Don’t Lie y Waka Waka (This Time for Africa), acompañados de una impresionante producción visual. Las pantallas LED de alta definición, efectos especiales y juegos de luces elevaron la experiencia, creando una atmósfera envolvente.
Antes de iniciar el show, Shakira compartió un mensaje sincero con sus seguidores: «Sé que la perfección no existe, pero sí sé que esta noche me entregaré a ustedes tal cual soy». Su frase «Una loba jamás olvida a su manada» rápidamente se convirtió en tendencia en redes sociales, destacando el amor y la conexión con sus fans.
Un concierto cargado de emociones
Uno de los momentos más emocionantes de la noche fue cuando Shakira interpretó Acróstico, una balada dedicada a sus hijos, Milan y Sasha. Durante la canción, las pantallas gigantes mostraron imágenes de sus pequeños, lo que tocó el corazón de todos los presentes. El gesto personal y emotivo de la cantante emocionó profundamente a los asistentes.
El show no solo estuvo marcado por los éxitos musicales, sino también por la conexión constante de Shakira con su público. La artista interactuó con sus seguidores, asegurándose de que cada momento se sintiera único. La banda en vivo y los bailarines también desempeñaron un papel crucial en el espectáculo, creando coreografías que complementaron perfectamente las canciones.
El regreso de Shakira a los escenarios es un recordatorio de su talento y la fuerza de su vínculo con los fanáticos. Su gira Las mujeres ya no lloran promete más sorpresas y momentos inolvidables para los miles de seguidores que la acompañarán en cada ciudad.
Lea también: Duolingo crea revuelo al anunciar la «muerte» de su mascota Duo
